Etiquetas

,

[página 131] (hasta aquí pude aguantar)

Qué viejo se ve, qué viejo está desde que se retiró. Y qué aburrimiento no beber. El mundo, en sí mismo, es muchas veces tedioso y carece de verdadera emoción. Sin alcohol, uno está perdido. Aunque hará bien en no olvidar que una persona sabia es aquella que monotoniza la existencia pues, entonces, cada pequeño incidente, si sabe leerlo literariamente, tiene para ella carácter de maravilla. En realidad, no olvidarse nunca de esta posibilidad de monopolizar a conciencia su vida es la única o mejor solución que le queda. Beber podría dañarle seriamente. Por otra parte, no encontró nunca nada en el alcohol, en el fondo de los vasos, y hoy en día no se explica muy bien qué buscaba ahí. Porque tampoco es que lograra escapar del aburrimiento, que volvía siempre implacable. Aunque en las entrevistas había simulado a veces una vida apasionante de editor. Ahí inventaba como un loco, aunque ahora se pregunta para qué. ¿De qué le sirvió aparentar que tenía un oficio extraordinario y que disfrutaba tanto con él? Claro que siempre será mejor ser editor que no hacer nada, como ahora. ¿Nada? Prepara un viaje a Dublín, un homenaje y un funeral a una época que desaparece. ¿Acaso eso es no hacer nada? Qué aburrido es todo, menos pensar, pensar que está haciendo algo. O pensar lo que piensa ahora: que hará bien en monopolizar su existencia y tratar de buscar, donde pueda, esas maravillas ocultas de su vida cotidiana que, en el fondo, si quiere, sabe perfectamente encontrar. Porque ¿acaso no sabe ver mucho más de lo que hay en todo lo que vive? Al menos le sirven de algo tantos años de entender la lectura no sólo como una práctica inseparable de su oficio de editor, sino también como una forma de estar en el mundo: un instrumento para interpretar de forma literaria, secuencia tras secuencia, el diario de su vida.

FIN

Nota: 1. (v.g.: En la radio sólo suena Tom Waits, The Beatles, Bob Dylan… nada de los grupos curtes que nos ponen a los demás) ¡Qué aburrimiento y qué chasco!

Ford Madox Ford, James Joyce, Ezra Pound y John Quinn


DUBLINESCA
Enrique Vila-Matas

327 páginas
Seix Barral Biblioteca Breve

Entrevista de Juan Cruz a Vila-Matas

Todo sobre Dublinesca

Reseña en ElCultural.es